Menú Principal

viernes, 23 de septiembre de 2016

COMENTARIO del Dgo 26° Tpo. Ord. Adaptación, actualizada del comentario de A.Alaiz



Dgo.26° Tpo. Ordinario. CicloC(Lc16,19-31)
                           EL RICO POBRE y EL POBRE RICO
   Jesús en su andar misionero, ha visto personas y familias que viven muy desahogadamente,  otras con muchas penurias.    Denuncia estas injusticias.
  Significativamente el pobre tiene nombre, Lázaro;   del otro personaje conocemos su proceder,  pero no su nombre.  Jesús al mantener su anonimato quiere indicar su irrelevancia, lo poco que era  ante  Dios.   Su  gran falta  es la omisión,   nuestra gran falta puede ser  la omisión, pasamos de largo ante Lázaro,  muchas veces  nuestra posición social nos insensibiliza, lo vemos o no queremos verle,  o de verle pasa a ser parte del entorno diario.

  “El  Espíritu nos lleva a descubrir más claramente que hoy la santidad no es posible sin un compromiso con la justicia, sin una solidaridad con los pobres y oprimidos. El modelo de santidad de obispos, sacerdotes,  religiosos y  laicos tiene que incorporar la dimensión social en la transformación  del mundo según el plan de Dios”
 Hace pocas horas el papa Francisco despidió a los nuncios que estaban reunidos en el Vaticano, diciéndoles: “…que las nunciaturas no sean lugar de reuniones de amigos…..acompañen a las iglesias con corazón de  pastores….la iglesia  necesita   testimonios  y  no  portadores  de  curriculum “….
  Hay una religión que capta adeptos minuto a minuto.  No es nueva, noes una institución pero tiene adeptos sumos sacerdotes, libros y lugares de culto;   shopping ,  supertiendas,  donde se compra no lo que falta, sino lo que está de moda,  lo que “te hará feliz si lo consumes”, bancos y banqueros donde juegan con las acciones .  El altar de esta nueva religión se sacrifica  todo por tener y acumular más.  Hay muchos  que tienen tanto que son tan pobres que no tienen tiempo de disfrutar  nada.  Su interés es acumular más y cuidar  su  tesoro .  Muchos hermanos nuestros son sacrificados en ese altar y pasan su vida sin tener acceso a lo más mínimo para vivir dignamente.
   El ocurrente Quino, pone en labios de Mafalda esta reflexión;  “es absolutamente imposible amasar una fortuna sin hacer harina a los demás…”
   Cuidado hermanos no nos digamos cristianos porque vamos a misa los domingos y los demás días  sacrifiquemos en el altar de este ya antiguo ídolo.    Recordemos a Jesús cuando nos dice:  No podemos servir a Dios y al dinero( Mt.6,24)
   Es preciso luchar proféticamente  contra este ídolo devastador.

Comentario de” El Don de la Palabra “ de Atilano ALAIZ.  En versión libre actualizada y autorizada por el autor, realizada por J.E.Bernadá

No hay comentarios:

Publicar un comentario