No ha sido sorpresa la noticia de su partida, motivo que no atenúa el dolor de la misma. Mantenemos la certeza de su llegada a la Casa del Padre.
Personalmente nos conocimos desde la adolescencia en la parroquia del Inmaculado Corazón de María, en la Acción Católica; en las interminables noches en casa de Nelson Bríndisi, de ahí hemos compartido la vida con todas sus consecuencias dolores, acuerdos, desacuerdos, llegada de hijos, múltiples actividades, religiosas, sociales, alegrías y esperanzas.
Fue el primero en tener movilidad propia, la FAMOSA FORDSON, nos juntábamos en Miguelete y esa poderosa máquina cargaba y cargaba. A ver si recuerdo, perdonen si olvido a alguna/o me lo dicen; las Agüero, los Zanotta, los Cascardo, los Bielli, las Bernadá, los Albistur, las Andreoli, incluidos los propietarios de la Fordson.
Recuerdo la gente mirando cuando llegábamos, empezábamos a bajar y nunca terminábamos de salir....
Estos y muchos recuerdos nos acompañarán por siempre manteniéndolo presente entre nosotros.
Termino con las palabras de Jorge Alonso cmf, compañerohermano;
"Qué viva José Luis en esa dimensión transfigurada que no puede imaginar la mente humana. Junto a Dios..." Jorge
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