Algunos blogueros nos llaman la atención y tienen razón. Nos dicen: lamentablemente la iglesia actua como la justicia civil. Hay justicia para POBRES y RICOS.-
Causa conmoción en la feligresía un cura de pueblo asista a un servicio de otra profeción; pero no causa consternación ni confusión en la feligresía que un párroco de una catedral haga crecer "sus ahorros" en dólares hasta poder duplicarlos y comprar propiedades en otro departamento; declare que el principal cerebro de la mayor estafa del país, es un cristiano de comunión diaria, colaborador del consejo parroquial; alquile un salón para depósito de la trama.....
Lo visto HAY JUSTICIA PARA POBRES y RICOS EN LA IGLESIA.-
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