La comensalidad de los discípulos de Jesús
Benjamín Forcano –Rufino Velasco
Al comenzar este tema, confesamos que nos acompañan dos sentimientos importantes: primero, que no vemos que dentro de la cristiandad haya una disponibilidad general a entender la Cena de Jesús –que hoy llamamos Misa o Eucaristía- tal como El la vivió y nos la quiso transmitir. Y segundo que, de ser esto verdad, el reto que se nos plantea es enorme: cómo reintroducir en los ámbitos de la vida cristianas la visión originaria deJesús.
Si uno está un poco familiarizado con la liturgia eucarística verá enseguida dos cosas: que es tema obsesivo el del sacrificio y el de que Jesús se convierte en altar, víctima y sacerdote. La Ultima Cena se reduce a “sacrificio”, siendo Jesús la víctima santa e inmaculada , que nos redimió del pecado original y queda , por tanto, como víctima preparada por el Padre para la Iglesia.
Creemos que transcurre por ahí el meollo de la cuestión: la ideología de sacrificio. Y la pregunta inevitable entonces es ésta: ¿Si la Ultima Cena no es sacrificio, por qué y cómo se ha reducido históricamente a esa categoría? ¿Qué significa propiamente esa reducción? ¿Cómo habría que entenderla y qué reformas serían necesarias?
Cuatro consideraciones previas
1.La Cena pascual de Jesús
No hay comentarios:
Publicar un comentario