miércoles, 25 de enero de 2017

"DE TODAS PARTES VIENEN.." De CHILE. "El CATALEJOdelPEPE" Agustín CABRÉ c.m.f.



Jesús es un hombre contra el sistema.

“Jesús: viene al mundo: no tiene casa, ni institución, ni refugio, ni vida propia individual. Se presenta como “el hombre”, así sin determinación que lo encierre en un grupo. El mismo no hace fundación alguna, no crea una moral ni una doctrina ni un sistema social o político, sino que abre las fronteras de todo esto. Su moral consiste en abrir las fronteras de la moral de su pueblo; su doctrina consiste en superar las doctrinas, los dogmas, los límites de su pueblo en todo su aspecto cultural. Lo hemos hecho referencia de una ortodoxia, pero nunca anunció un catecismo ni fundó un culto. Ni siquiera la cena es un culto instituido sino un llamado a los discípulos a reunirse en un memorial vivo y fraterno, muy lejos de las rúbricas del templo.
Entonces ¿qué misión es la que se le ha encargado? Aquella que realiza por su palabra, su testimonio, su muerte y su resurrección.
La obra de Jesús no consiste en manejar las fuerzas del universo ni actuar mediante la autoridad en la sociedad humana. Su acción consiste en dirigirse al hombre para que actúe bajo el Espíritu que está en él. La palabra de Jesús alcanza al corazón del hombre, le hace levantarse, surgir de nuevo, resucitar del pecado para una vida nueva. Jesús no crea cosas nuevas sino que hace que las cosas antiguas se vuelvan nuevas.
Y su palabra es eficaz a pesar de la muerte. La actuación de Jesús es lucha y en esa lucha la muerte lo derrota: la palabra es vencida por el mal. Dios no interviene creándole una zona de refugio. Jesús está en medio de los hombres expuesto a todos los asaltos.
Sin embargo, Dios da la fuerza a la palabra por medio de la resurrección. ¡Esa es la respuesta de Dios; ése es el signo dado a la humanidad! El crucificado se transforma en vencedor. Su palabra, repetida por el Espíritu, tiene fuerza y logra establecer las simientes del reino, camina y crece en el mundo. Va levantando a la humanidad por medio de la simiente de la libertad y la fraternidad. Donde están esas semillas están el Padre y el Hijo y el Espíritu, actuando. Donde hay salvación temporal hay también salvación eterna” (Comblin).
Este artículo fue escrito en CatalejosEnlace Permanente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Multimedia


PARTE 1

PARTE 2

Bielli - Bernada