Un mensaje de esperanza en
medio al horror del genocidio de Gaza
Como
ya sabemos fue bombardeada el 17 de julio a las 10 de la mañana la única
iglesia católica de la franja de Gaza. La parroquia de La Sagrada Familia.
Su
párroco, argentino el P. Gabriel Romanelli, fue herido en las piernas, él quién
le actualizaba al fallecido Papa Francisco a diario la situación de la guerra.
En
esa parroquia viven allí refugiados de la guerra además de 600 personas, un
grupo de jóvenes comprometidos y participan en las actividades parroquiales,
entre ellos está SuhailAboDawod , joven activo que desde los 15 años sintió la
vocación, aunque aun no pudo entrar al noviciado debido a la guerra, en
palabras del P. Romanelli.
Este
joven vive allí en la iglesia desde que empezó el genocidio, y perdió todo.
Pero sus palabras son un contundente mensaje de esperanza y amor.
Suhail
ha sido un firme testigo de la fe en medio al horror , publicando cartas en
donde expresa que, pese a la destrucción de su hogar el 25 de octubre de 2023,
encontró en la iglesia su verdadero hogar espiritual . Narró su experiencia
describiendo largas noches en vela custodiando el recinto, viviendo miedo y
pánico constante. En aquél momento envió una carta titulada “ La fe es más fuerte que la guerra”.
En
el diario parroquial compartió mensajes como “ La iglesia es mi verdadero
hogar…después de que el otro fue destruido”.
Es
una luz en medio a la oscuridad.
Conmovedora carta de un joven en la
Franja de Gaza:
“La fe es más fuerte que la guerra. Soy yo otra vez, todos los días
perdemos algo de nosotros, ya sea casas o personas. Estamos orando desde el
fondo de nuestro corazón y pidiendo a Dios que nos dé paz y justicia en nuestra
Tierra Santa.
Ayer,
25 de octubre, recibí un mensaje antes de que comenzara la Misa de que mi casa
había sido bombardeada y destruida por las fuerzas de ocupación. Al principio
me sentí muy triste y decepcionado, pero luego me di cuenta de que nuestras
vidas son mucho más importantes que cEn la santa Misa recé intensamente a
Nuestro Señor Jesús y le pedí que me diera más fuerza y fe para llevar
adelante adecuadamente mi situación. En todos los casos, considero y creo que
la Santa Iglesia es mi primer y último hogar y luego viene mi hogar que ha sido
destruido. La Iglesia será siempre mi hogar y Jesucristo permanecerá en mi
corazón dondequiera que vaya.
Seguiremos orando, ayunando y agradeciendo a Dios por todo lo que ha hecho por nosotros mientras estemos vivos. Nos sacrificaremos por Jesús como Él se sacrificó por nosotros primero. La esperanza y la determinación son más fuertes que cualquier guerra que esté sucediendo en nuestra Tierra Santa.SuhailAboDawood, Gaza, 26.10.20
La intención de esta
publicación es porque creo que miramos, reflexionamos y replicamos, con un
enfoque en el dolor, pero el amor es más fuerte que la muerte, o como lo dice
el joven de Gaza, la fe es más fuerte que la guerra, si miramos solo el dolor,
nos quedaremos atrapados en la cruz, pero si entre todos animándonos con estos
testimonios, entonces miraremos desde el amor del resucitado, que está allí en
dónde aparentemente no lo vemos.
Y segundo, la reflexión,
tomando en cuenta la realidad de Gaza, tenemos testimonios como este, recordemos
a la hora de quejarnos de nuestros dolores, de nuestras dificultades, pero
vivimos en un lugar si guerras, tenemos un techo sobre nuestras cabezas, un
plato de comida en la mesa, una ducha y una cama limpia cada día. Estamos
juntos en comunidad, alimentado nuestra fe y nuestra esperanza, nos amamos,
hemos sido bendecidos abundantemente por Dios, pues demos a conocer a otros
nuestra razón de vivir, que teniendo todo eso y más, poder dar testimonio y
cuando algo falta saber que es para crecer en la presencia de Dios.
Divulguemos historias de
vida como la de Suhail, y no tanto del genocidio que esta causando Israel, que
de eso el padre/madre Dios lo sabe.
Todo sucede con un
propósito, pongamos nuestro enfoque en el Resucitado que atravesó la cruz por
amor infinito a nosotros. Y al final estaremos junto a Él.
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