A LOS AMIGOS
Hoy que ya no está físicamente con nosotros siento la necesidad de
expresar mi agradecimiento a todos quienes de una manera o de otra estuvieron
preocupados por la salud de Graciela.
Al recibir mensajes de muchísimos de ustedes es palpable que ella
se hizo querer por ser muy franca y luchadora por sus ideales
Luchó por ser docente y posteriormente integrar los Equipos
Docentes Católicos para mejorar SU ESCUELA PUBLICA.
Luchó para superar los problemas para parir a nuestros dos
hijos.
Luchó contra la dictadura que amenazó su estabilidad laboral como
docente y con un esfuerzo sobrehumano hizo los cursos de Podóloga.
Luchó por la vivencia de la Comunidad San Felipe y Santiago.
Luchó por una Iglesia comprometida con el hombre y no con las
instituciones.
Luchó y peleó hasta el último momento con una entereza tremenda su
enfermedad. Hacía planes para nuestro 50 aniversario de bodas, para paseos a
Chile.
Nunca se desesperó y con el apoyo de la Unidad de Cuidados
Paliativos del Hospital Evangélico supo ir llevando su deterioro que al final culminó con su muerte.
Cuando Daniel me avisó que había fallecido, fui inmediatamente a verla e increíblemente tenía en su cara una sensación de
paz que contrastaba con la que tenía en sus últimos días.
El hoy al no tenerla me hizo meditar sobre algunos juicios que
había tenido sobre actitudes de otras personal y hechos de vida.
También veo que mi estado de tristeza es un egoísmo de mi parte ya
que lo tengo porque estoy mayormente sólo y a cada momento encuentro sus cosas
materiales y situaciones en que hemos vivido siempre juntos.
Ella está en Paz en el Reino que siempre tuvo presente con
su FE.
Me faltó agregar que adoraba la familia y especialmente a
Emiliano, Bruno, Sofía y Maite
Espero que en todos ustedes persista el recuerdo de quién fue una
gran Mujer. Osvaldo
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