“Cada vez se registran más crímenes terribles en la Amazonía contra las personas y el planeta para proveer soja y carne. Sin embargo, una destrucción similar en otro hotspot de biodiversidad de América del Sur , impulsada por otra materia prima, el algodón, sigue pasando desapercibida”, advierte Carvalho . La entrevista es de Andrés Actis , publicada por La Marea - Climática , 16-04-2024. La traducción es de Cepat .
Aquí está la entrevista. ¿Qué motivó la investigación? Advertimos que hay muchas investigaciones sobre los impactos de la producción de soja y carne en la deforestación en Brasil , pero poco o nada se dice sobre los impactos del algodón. Necesitamos centrarnos en esta cuestión. La investigación duró un año. Hicimos trabajos de registro, seguimiento de datos y también trabajos secretos para conocer, de primera mano, las conexiones comerciales de toda la cadena del algodón, cómo se compra, cómo se vende. Entramos como supuestos inversionistas extranjeros en dos ferias de moda, en París y Frankfurt , y en una feria de agronegocios en Bahía , Brasil .
¿Y qué encontraron? ¿Está naturalizada la deforestación ilegal en toda la cadena?
Si las empresas lo saben, es evidente que no están actuando. También es posible que no lo sepan. En el caso de H&M y Zara , empresas mencionadas en nuestro informe, afirman desconocer esta grave irregularidad. Si este es el caso, hay una clara falta de seguimiento de sus cadenas de suministro. Todas las grandes empresas de moda de Europa deberían realizar un seguimiento de dónde procede el algodón y cómo se produce. No pueden confiar en sistemas de certificación como Better Cotton . La responsabilidad es intransferible.
Así que la supuesta ignorancia no es excusa.
La respuesta de Inditex es un ejemplo. Es insuficiente, se mire por donde se mire. Esta multinacional necesita cambiar sus prácticas. Las palabras no sirven de nada. Necesitamos acciones concretas para que el algodón que se compra sea sostenible y legal. Esto debería haberse hecho hace años. Hay mucha información pública disponible sobre los problemas del cultivo del algodón en el Cerrado . Brasil es el segundo mayor exportador de algodón del mundo. Las empresas deberían haber realizado este cruce de datos hace mucho tiempo.
El otro gran defecto está en el nivel de las políticas de regulación y control. ¿Le preocupa el avance de una ola reaccionaria en Europa, que podría revocar las pocas leyes que están sobre la mesa?
Necesitamos urgentemente una regulación llevada a cabo por los gobiernos de los países consumidores. El sector privado no ha logrado hacer que sus cadenas de suministro sean más sostenibles. Necesitamos que los gobiernos obliguen a las empresas a hacer esto. El avance de esta ola reaccionaria, con elecciones a la vista, es un riesgo evidente. Aunque llevamos años debatiendo posibles regulaciones, ahora estamos viendo una reacción muy negativa por parte de varios miembros de la Unión Europea . Hay un intento de debilitar estas leyes. El problema es que no tenemos tiempo.
El sistema fast fashion se sustenta en una creciente demanda de materias primas. ¿No es, después de todo, la ilegalidad en la extracción de algodón un problema para el sector?
Es evidente que las empresas tienen modelos de negocio basados en la moda rápida que requieren cada vez más materias primas. Parte del negocio es alentar a los consumidores a comprar cada vez más, lo que significa más algodón, más tierra, más deforestación, más pérdida masiva de bosques y biodiversidad . El lema de seguir como siempre ya no se tolera .
Sin embargo, insisto: el gran problema es la ausencia de leyes en Europa , en el Reino Unido , en Estados Unidos . Estas leyes acaban de ser puestas sobre la mesa. Sin embargo, durante décadas simplemente confiamos en el sector privado. El consumo es muy elevado y no está regulado. Esto también explica por qué los precios no reflejan los impactos ambientales y humanos de la producción. Pagamos precios muy bajos que ocultan estos costos. La destrucción de los bosques no se debe sólo a lo que comemos, sino también a la ropa que vestimos.
¿Cuál es el papel de los consumidores en este problema?
A los consumidores les resulta difícil saber de dónde proceden los productos que compran. No hay información, no hay transparencia. Los consumidores tienen un papel importante, pero la responsabilidad central recae en las empresas y el poder político.
Hablamos de la responsabilidad de los gobiernos de los países productores. ¿Qué está haciendo Brasil para detener esta deforestación ilegal?
El gobierno de Brasil ha logrado reducir la deforestación en el Amazonas . Necesitamos la misma seriedad y la misma firmeza en relación al Cerrado . Hay un plan, pero está incompleto. El problema es la deforestación ilegal . Los gobiernos estatales continúan autorizando niveles insostenibles de deforestación . Esto tiene que cambiar. Es necesario que el Gobierno Federal trabaje con estos gobiernos estatales para cambiar sus políticas de autorización de la deforestación y la expansión de los agronegocios .
El daño ambiental de esta ilegalidad ya es irreversible. ¿Cómo podemos explicar que sepamos tan poco sobre este tema?
Parte de esto se explica por esa falsa imagen de sostenibilidad que transmiten las empresas. Un ejemplo es la certificación del sistema Better Cotton , vendido como la gran garantía de sostenibilidad. Y no es la realidad. El lavado verde es parte de este problema. Para los consumidores, este lavado verde hace que la tarea crítica sea muy difícil. Sin regulación, sin leyes, este sistema seguirá igual, sin cambios.
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