10 de julio del 2020; hoy temprano nos llama Maida para comunicarnos la partida de GERARDO a la CASA del PADRE. Le acompañamos en el dolor humano, pero le recordamos de nuestra y su certeza, que Él con su transitar en la construcción del Reino, acá en la tierra tiene suficientes credenciales para ya estar en presencia del PADRE. GERARDO (diácono) mientras su físico le dejó y muchas veces sin apoyos y contra las directivas de sus superiores se instaló del lado de los más necesitados, cristianos o no. Mantengo en el recuerdo su lucha junto a los obreros del vidrio, cuando las patronales les dejaron abandonados sin cobrar lo que se les debían y olímpicamente abrieron empresas en Brasil. Lo vemos colocando el cartel que decía LA LUCHA QUE SE DA, ES BATALLA QUE NO SE PIERDE; llevando víveres para la olla solidaria, colaboración que le proporcionó seria reprimenda de las autoridades de la época. Su integración a la Ceb. se dio en un momento de impase, nos habíamos quedado sin otro grande de la iglesia que nos acompañó hasta su PASCUA, el querido Dn. Antonio RAMIREZ; ahí Gerardo con su estilo cansino, pausado nos brindaba su interpretación de la Palabra. Ya su físico daba muestras de algunas dolencias que con el tiempo se fueron agudizando. Maida tomó el timón de tamaña tarea y compartió duros momentos. Hace un rato volvimos de acompañarle, expresándole el acompañamiento de la Ceb. que puede contar con nosotros en el doloroso tramo que necesariamente debe recorrer; que le esperamos para seguir pasando la antorcha que dejó encendida Gerardo para que nunca se apague.
Mañana sábado le tendremos presente en la reunión.-
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