Recordar de un modo singular a todos y todas que, en el transcurso de la historia, dieron su vida por ayudar a los demás, por luchar por un Mundo más justo y más solidario: creyentes y no creyentes...
En este sentido, recuerdo a muchos de mis amigos de las comunidades de base y de Moceop, a muchos sindicalistas, a muchos militantes obreros entregados a la lucha por la justicia social, a muchos obispos y misioneros en tantas partes del Mundo....(Casaldáliga, Helder Cámara, Óscar Romero, Ellacuría...), hombres y mujeres. Sería una lista demasiado larga.
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| Tumba de Pedro Casaldáliga |
Que su recuerdo nos anime a todos a seguir sus pasos para luchar, en la medida que podamos, por esa Sociedad Nueva, por esa Iglesia más evangélica y cercana a Jesús.
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