"Una cruda noche de invierno,lluvia, viento bajo 0, tiritando un hombre decide golpear el portal de la capilla del pueblo. Luego de largo rato aparece el cura, al verlo le dice: esto no es una posada es un templo cómo se atreve,!! el indigente sollozante le suplica le deje entrar, duermo en el suelo pero bajo techo señor !! Está bien pase, pero a primer hora se marcha, no quiero nadie se entere.
A altas horas de la madrugada el cura siente ruidos, el crepitar de maderos, salta de la cama se dirige al templo y vaya escena!! el hombre había prendido fuego una imagen de San Roque para calentarse....
El cura a los gritos ¿ Estás loco de remate, sabes lo que has hecho, un tremendo sacrilegio. !!!
El hombre le dice sollozando me estaba muriendo de frío, disculpe no lo sabía, perdone !!
Fuera ! exclamó el cura aléjate de mi vista y no quiero verte jamás!! El hombre rogó le perdonara, pero cada vez era peor la situación, tomó sus harapos y volvió a la calle en plena tormenta.
Pasaron unos días y el cura fue llamado al obispado; entre asustado por haber cometido el error de permitir la entrada, pero con la ejemplar decisión de la expulsión y la rápida reposición de la imagen pensaba todo no pasaría de una amonestación.
Al entrar; el clérigo le dice: tomé asiento, he sabido de su comportamiento de hace unos días, quiero comunicarle el desagrado, por su comportamiento de indigno sacerdote, has dado más valor a una imagen de madera que a un hombre vivo. (La oración de la rana)
Solo recordar a Jesús enviando a los Apóstoles. Id ligeros de equipaje!
ResponderEliminarSolo recordar a Jesús enviando a los Apóstoles. Id ligeros de equipaje!
ResponderEliminarAhora consulto, encontrar a estos obispos, es frecuente?