Hace unos años leyendo a
Anthony de Mello, en ” La oración de la
rana”, recuerdamos este relato: “Un labriego, cada tarde al término de la jornada
pasaba por la capilla del pueblo, se inclinaba frente al crucifijo, agradecía
por el día y realizaba un pedido, así durante años. Ya era conocido por los vecinos, su actitud indeclinable así lloviera y
tronara. Hasta que una tarde sale
corriendo del templo a los gritos de alegría, era tanto el griterío que los
vecinos corrieron a felicitarlo, se le había cumplido el pedido!!! NO, NO, les dijo él, no el Señor me dijo: no me concedería el
pedido, porque no me convenía….- Entonces por qué tanta alegría José? Porque el Señor me contestó!!!......
El sábado pasado nos sucedió
algo muy parecido, la Ceb.
SanFelipeySantiago ha estado presente en
cuanto encuentro de comunidades, de
laicos, de grupos, de…. siempre llevamos algunas
inquietudes que han naufragado. Reiteramos
el sábado pasado recibimos el texto que
compartimos abajo, no sabemos qué
sucederá; pero estamos como el labriego, locos de
contentos, NOS CONTESTARON!!!!
Recibimos este sorpresivo texto hoy sábado a la tarde, extensivo a quienes nos apoyaron, Jorge, Silvia, Madilene, Eduardo..con aportes que dejamos en mano de los organizadores
Hola Eduardo-Cristina
hoy hace una semana nos encontramos los laicos del Uruguay, quería compartir que te agradezco mucho que nos hayas acompañado, estamos trabajando sobre las conclusiones y apenas lo procese te lo comparto... muchas gracias, por todo lo que nos apoyastes un fuerte abrazo y bendecida jornada
p. DELAI
Hugo García
Secretaio ejecutivo
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