CUERPO DE CRISTO
Corpus
C Lc
9:11-17:
Ustedes
son mi Cuerpo
Narrador: La
comunidad de Jesús y sus discípulos y discípulas están apoyando la toma del
camino que conduce a la Gran Arenera. Saben que ya está afectando a la salud de
la gente que vive cerca y en poco tiempo va a provocar deslaves que sepultarán
aldeas enteras que están en las faldas de los cerros excavados.
Gente GRITAN
CONSIGNAS Y CANTAN.
Pedro
Estamos defendiendo la madre Naturaleza.
Magdalena Y la vida de
toda la gente.
Jesús Toda
lucha por la vida es un esfuerzo por acercar el Reino de mi Padre.
Narrador Cada vez
que sopla el viento, levanta una gran nube de arena y polvo que empieza a
afectar a la gente que manifiesta pacíficamente contra la arenera.
Magdalena Tengan un
poco de agua. Vamos a mojar los pañuelos para poder respirar.
Narrador
Rápidamente corren las bolsas de agua y los pañuelos mojados. La gente comparte
esos escasos recursos que tienen para que nadie se quede sin atención.
Jesús Cuando
la gente acapara, es un infierno. Cuando compartimos, aun las penurias se
convierten en paraíso.
Narrador La gente
sigue cantando, a pesar de que el sol está cayendo y ya va entrando la noche.
Pedro Jesús,
despidamos a toda esta gente para que regrese a sus
casas.
Juan El
problema es que ya no nos podemos ir. Los antimotines están afuera cercando la
salida.
Magdalena Además ya
está oscureciendo y a esta hora ya no hay transporte.
Pedro
Tal vez
puedan buscar alojamiento y comida en las aldeas y pueblecitos de los
alrededores, porque aquí estamos lejos de todo.
Jesús Denles
ustedes de comer.
Pedro Ay
Jesús. Ni que fuéramos mercado ambulante. Yo metí en el morral unos panecitos
que sobraron del desayuno, pero ¿qué es eso para tanta gente?
Juan Yo
traía dos mojarras que pasé comprando por Amatitlán, pero saber si no se habrán
shuqueado.
Pedro ¿O
querés que vayamos nosotros a comprar alimentos para todo este
gentío?
Juan Huy,
somos como cinco mil hombres.
Magdalena Y más
mujeres todavía… y cuántos niños y niñas…
Pedro Este
sí es un gran problema. Y Judas no aparece con la bolsa de la comunidad.
Jesús Hagan
que se siente la gente en grupos de cincuenta.
Pedro Eso sí
lo podemos hacer. Tenemos bastante experiencia.
Juan Y aquí
hay buenos líderes, hombres y mujeres que saben hacer su trabajo de organización
popular.
Narrador Dicho y
hecho. En pocos minutos todas y todos están sentados en la gramita del cerro que
están defendiendo. Jesús entonces toma los cinco panes y los dos pescados,
levanta los ojos al cielo y pronuncia la bendición.
Jesús
Gracias, Padre, porque de ti recibimos todos los bienes. Gracias por la madre
tierra que nos das para procurar nuestro alimento y porque nos das conciencia
para defenderla.
Narrador Al
escuchar a Jesús, cada quien empieza a sacar lo que lleva y a compartirlo con
los más cercanos, de manera que abunda la comida.
Gente 1 ¡Jesús
está a la cabeza del pueblo!
Jesús Yo soy
la cabeza y ustedes son mi cuerpo.
Gente 2 ¡Viva
Jesús!
Jesús Vivan
ustedes. Estén vivos, atentos y despiertos. Yo soy la cabeza y ustedes son mi
cuerpo. Ustedes son mis manos y mis pies, ustedes son mis ojos y mis labios…
Tomen estos alimentos y repártanlos de modo que alcance para todos y todas. Que
nadie se quede sin nada, que no haya entre ustedes nadie que pase hambre o
necesidad.
Narrador Y cada
quien empieza a repartir según sus capacidades. Esa comida se convierte en un
signo sagrado de lo que están haciendo en sus comunidades: Toman el pan aquellas
manos que saben acariciar, curar, alimentar. Parten y comparten las madres que
saben administrar y están acostumbradas a repartir lo poco que tienen para que
todos los hijos reciban lo necesario. Cargan los canastos aquellos brazos que
saben llevar cargas pesadas y abrazar. Caminan los pies que saben ir a quienes
están lejos, a quienes pasan necesidad. Hablan los labios acostumbrados a
bendecir y consolar. Observan y organizan los ojos que saben mirar a los más
pequeños y excluidos de la sociedad. Todos los corazones vibran unidos como uno
solo, hermanados en el amor materno de Dios y de su Hijo Jesús.
Todos
CANTAN: Todos unidos, formando un solo Cuerpo
Un pueblo que en la Pascua nació.
Miembros de Cristo en sangre redimidos
Iglesia peregrina de Dios.
Narrador Todos y
todas comen hasta saciarse. Acaban de realizar el milagro del compartir. Lo han
ido aprendiendo en las comunidades, donde están trabajando para que a nadie le
falte lo necesario, donde viven en plenitud la opción de Jesús por los pobres,
donde el Evangelio se va haciendo cada día buena noticia.
Magdalena Qué lindo es
ser Cuerpo de Cristo.
Juan Qué
lindo es ser Iglesia-comunidad.
Pedro Desde
hace más de 40 años, las Comunidades Eclesiales de Base han sido vida, vitalidad
y renovación de la Iglesia.
Juan Por
eso no entiendo por qué algunos las combaten y las condenan.
Magdalena Y hasta han
creado grupos paralelos, evasores y adormecedores de las conciencias… y les
ponen el nombre de comunidades.
Pedro
Entiendo que las persigan quienes han acaparado el poder y las riquezas, porque
decimos que nadie puede servir a Dios y al dinero. Pero que las persigan
pastores de la misma Iglesia… Eso no lo entiendo.
Jesús
Quienes no entienden son ellos. Se han hecho dueños, en vez de servidores.
Piensan que la Iglesia es una estructura de poder y no una comunidad de
servicio. Por eso dan coces contra el aguijón. Persiguen a mi verdadera Iglesia,
me persiguen y me condenan a mí.
Gente 1 ¿Pero
qué diferencia hay entre las comunidades y los movimientos?
Jesús Las
CEBs, como les llamamos a nuestras comunidades, no son un movimiento en la
Iglesia, son la Iglesia en movimiento.
Gente 1 Pero eso
dicen también otros grupos.
Jesús Ojalá
que lo sean. Pero si no construyen Reino, no son Iglesia. Las CEBs son mis
discípulos y discípulas que se organizan ahí donde viven para hacer presente el
Reino de Dios. Por eso son Iglesia.
Juan La
Iglesia debe ser una comunidad comprometida con el Reino y las CEBs somos una
manera de hacerlo.
Pedro Por
eso decimos que somos una manera de ser Iglesia.
Magdalena Somos la
Iglesia presente en los rincones más apartados del mundo.
Pedro Por
eso ahora estamos organizando un re-lanzamiento de las CEBs. Y estamos seguros
que nos van a dar el reconocimiento y el impulso que necesitamos para sacudir a
la Iglesia de su acomodamiento, como dijeron los Obispos en
Aparecida.
Juan
Dijeron que la Iglesia necesita una conmoción, un terremoto que la despierte y
la devuelva a la vida, movida por el Espíritu Santo.
Pedro
Dijeron: “La
Iglesia necesita una fuerte conmoción que le impida instalarse en la comodidad,
el estancamiento y en la tibieza, al margen del sufrimiento de los pobres del
Continente.” (362)
Magdalena Hoy también
falta aire en nuestra Iglesia. Como el Papa Juan 23 abramos las ventanas para
que entre aire nuevo y podamos cumplir la misión que Jesús nos
entregó.
Jesús
Ustedes son mi cuerpo y Yo soy la cabeza. Un cuerpo funciona bien, si hay
armonía entre todos sus miembros y cada miembro cumple su función.
Pedro
Necesitamos también un re-lanzamiento del Concilio Vaticano II, que promueve una
verdadera conversión de la Iglesia: de las ovejas, pero sobre todo de los
pastores.
Juan
Nuestra Iglesia debe ser así, como lo que estamos viviendo ahorita: miren qué
organización, qué participación de toda la gente, qué solidaridad.
Magdalena Si en la
Iglesia cada quien cumple su misión, como un solo cuerpo, lograremos la
transformación de todo el mundo, para que a nadie le falte lo necesario y
podamos vivir con dignidad y con alegría.
Narrador Poco a
poco, van recogiendo los pedazos que sobraron, y llenan doce canastos. “Doce”,
signo del pueblo de Dios. “Doce” signo del nuevo pueblo que está llamado a ser
fermento para que la masa crezca y haya alimento para todos y
todas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario