La salvación es un don del Señor. El cristiano sabe que todo es gracia. Por eso, hay que protegerse de los cristianos que se presentan rígidos y perfectos. Y los hipócritas que tratan de "sucio" al otro, dando "malas noticias".
El informe es Andrea Tornielli publicado en Vatican Insider , 16/10/2018. La traducción es de Moisés Sbardelotto .
Francisco dijo que el pasaje del Evangelio que relata el almuerzo de Jesús en la casa de un fariseo. El Nazareno estaba sentado en la mesa sin hacer las abluciones rituales, provocando el asombro de su invitado en la falta de cumplimiento con la ley. Y él había respondido claramente a la objeción de fariseo .
En su homilía, el Papa hizo hincapié en la diferencia entre el amor de la gente por Jesús , porque llegaron a sus corazones, y también un poco de interés, y el odio expresado a él por los maestros de la ley, escribas, saduceos, fariseos, que le siguieron a la captura por sorpresa. Eran los "puros".
"Eran realmente un ejemplo de formalidad. Pero les faltaba la vida. Eran - por así decir - 'planchados'. Eran rígidos. Y Jesús conocía su alma. Eso nos escandaliza, porque ellos se escandalizaban con las cosas que Jesús hacía cuando perdonaba los pecados, cuando curaba el sábado. Se rasgaban sus vestidos: '¡Oh! ¡Qué escándalo! Esto no es de Dios, porque se debe hacer esto. No le importaba a las personas: se importa con la Ley, las prescripciones, las rúbricas ".
El Papa resaltó la libertad de Jesús, que acepta la invitación del fariseo para almorzar y, viéndolo escandalizado con su comportamiento, le dice: "Vosotros fariseos, limpias el vaso y el plato por fuera, pero vuestro interior está lleno de robos y maldades. "¿No son palabras bonitas, eh?", Comenta el pontífice. "Jesús habló por supuesto, no era hipócrita . Hablaba claro. Y le dice: "¿Pero por qué miran hacia afuera? Mira lo que hay dentro. De nuevo les dijo: 'Estás sepulcros blanqueados '. Bien, elogio, eh? Bonitos por fuera, todos perfectos ... todos perfectos ... Pero, por dentro, llenos de pudriciones, de avidez, maldad, dice. Jesús distingue las apariencias de la realidad interna. Esos señores son los 'doctores de las apariencias': siempre perfectos, pero lo que hay dentro?
El Papa recordó, a continuación, otros pasajes del Evangelio en el que Jesús condena a las personas que tienen esta actitud, por ejemplo, la parábola del buen samaritano o la página que describe sus aparentemente para ayunar y dar limosna. Para ellos, dice Francisco , "interesa a mirar": "Jesús califica a estas personas con una palabra: 'hipócritas . '" Personas ávidas, "capaces de pagar para matar o calumniar, como se hace hoy. Hoy también se hace así: se paga para dar malas noticias, noticias que sujen a los demás. Una referencia que puede estar vinculado a los acontecimientos de las últimas semanas y los últimos días, con los expedientes que envenenan la vida de la Iglesia.
Francisco recordó que los fariseos y los escribas eran personas rígidas, no están dispuestos a cambiar. "Pero siempre, debajo o dentro de una rigidez, hay problemas. Graves problemas. Por detrás de las apariencias de buen cristiano, apariencias, para que quede claro, que siempre intentan aparecer, maquillar el alma, hay problemas. No es Jesús . Allí está el espíritu del mundo.
Jesús los llama "tontos" y les aconseja a abrir sus almas al amor, para permitir que la gracia de. Porque la salvación, explica el Papa, es un don gratuito de Dios. Nadie se salva a sí mismo, nadie. Nadie se salva a sí mismo ni siquiera con las prácticas de esas personas.
Bergoglio terminó su homilía con una advertencia: "Manténgase en sintonía con el disco. Manténgase en sintonía con los cristianos - ya sean laicos, sacerdotes, obispos - que se presentan como ' perfecta ', con fuerza. Cuéntanos. No está ahí el Espíritu de Dios. Falta el espíritu de libertad. Y nos quedamos atentos con nosotros mismos, porque eso nos debe llevar a pensar en nuestra vida. ¿Intento mirar apenas a las apariencias? ¿Y no mudo mi corazón? ¿No abro mi corazón a la oración, a la libertad de la oración, a la libertad de la limosna, a la libertad de las obras de misericordia?
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