El covid - 19 está revelando hasta qué punto hay dos humanidades inmunológicamente diferentes. En las naciones ricas, aproximadamente una cuarta parte de la población cae en la categoría de alto riesgo debido a problemas de salud crónicos y de edad, a menudo relacionados con la raza y la pobreza. Por otro lado, en los países de bajos ingresos y en muchos países de ingresos medios, la mitad o las tres cuartas partes de la población está en riesgo. El cofactor más importante es la disminución de la inmunidad debido a la desnutrición, las infecciones gastrointestinales generalizadas y las enfermedades no controladas y no tratadas, como la malaria y la tuberculosis.
En la actualidad, 1.500 millones de personas viven en barrios marginales en África , Asia meridional y América Latina , que son incubadoras perfectas para la enfermedad. Sabemos que la pandemia está fuera de control allí, pero en gran medida sigue siendo invisible en las estadísticas fragmentadas actuales. Y si Europa muestra una voluntad de compartir las existencias de vacunas eventuales con los países pobres, la administración Trump ha demostrado recientemente con la compra de todas las existencias mundiales del medicamento Remdesivir , que no tiene intención de compartir nada. América primero significa África al final.
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