Un importante cardenal sudamericano defiende la agenda de la próxima reunión de obispos católicos de la región amazónica en octubre después de que dos cardenales europeos retirados afirmaran públicamente que esto no respeta las enseñanzas de la Iglesia.
El informe es de Joshua J. McElwee , publicado por National Catholic Reporter , 07-07-2019. La traducción es de Natalia Froner dos Santos .
El cardenal Pedro Barreto Jimeno , arzobispo de Huancayo , en el centro-sur de Perú , dice que el instrumento de trabajo , que plantea la posibilidad de ordenar a ancianos casados como sacerdotes en áreas rurales con necesidades pastorales "expresa ampliamente los sentimientos y deseos de Muchos representantes de la gente del Amazonas ".
En un artículo publicado en la revista jesuita italiana La Civiltà Cattolica el 18 de julio, Barreto también afirma que la herramienta de trabajo, lanzada el 17 de junio, es el fruto de la consulta con casi 90,000 personas en los dos años de preparación para la reunión, conocida como Sínodo y se celebrará en el Vaticano del 6 al 27 de octubre .
Barreto describe el proceso de consulta como una "experiencia sin precedentes" para un sínodo y dice que "da buena cuenta de lo que está sucediendo en esta región".
"Creemos que la expresión de esta riqueza traerá, sobre todo sospecha, elementos para una mejor comprensión de una realidad que está pidiendo atención", escribe.
Barreto , un jesuita que fue nombrado arzobispo por el Papa Juan Pablo II en 2004, parece estar respondiendo en su artículo a los recientes ataques contra el Sínodo del Amazonas por los cardenales alemanes Gerhard Müller y Walter Brandmüller .
Si bien los peruanos no mencionaron a los otros cardenales por su nombre, ambos prelados alemanes argumentaron en los últimos días que la agenda del Sínodo es " herética ".
En un ensayo publicado en el sitio web del blogger de derecha italiano Sandro Magister el 27 de junio, Brandmüller dijo que la agenda "contradice la enseñanza obligatoria de la Iglesia en puntos decisivos". En una entrevista del 11 de julio con un periódico italiano, Müller estuvo de acuerdo con Brandmüller y dijo que encontró "gran confusión" en el documento.
El instrumento de trabajo establece que se pidió a la Iglesia que "estudie la posibilidad de una ordenación sacerdotal para los ancianos ... para garantizar los sacramentos para las áreas más remotas de la región".
El documento también dice que la Iglesia debe considerar "un ministerio oficial que se puede conferir a las mujeres , teniendo en cuenta el papel central que desempeñan en la iglesia del Amazonas".
Barreto no profundizó en las cuestiones teológicas en su artículo del 18 de julio, sino que se centró en las necesidades pastorales y económicas de las personas en toda la región amazónica, que cubre aproximadamente tres millones de millas cuadradas y se divide en ocho. países de américa del sur .
Los peruanos llaman a la Amazonía "un territorio cada vez más devastado y amenazado", citando, en particular, el efecto de las empresas que participan en la extracción de minerales, lo que puede conducir a la deforestación, las aguas contaminadas y los conflictos con los pueblos indígenas.
"Para nosotros, los miembros de la Iglesia Católica en el Amazonas, queremos ser testigos vivos de esperanza y cooperación", escribe Barreto . "En este sentido, como un evento eclesial, el Sínodo puede ser una señal importante de la respuesta efectiva que promueve la justicia y la defensa de la dignidad de las personas más afectadas".
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