IHU, Adital.-En memoria de Juan Carlos Scannone , reproducimos el artículo publicado aquí en IHU en 2014.

"La reunión de teólogos en el Colegio Franciscano de Petrópolis , Brasil , en 1964, tuvo como objetivos el examen, desde un punto de vista teológico, de los problemas de la Iglesia latinoamericana. Entre los pioneros que participaron en él estaban el peruano Gustavo Gutiérrez , el uruguayo Juan Luis Segundo y el recordado Lucio Gera " , escribió  Juan Carlos Scannone , jesuita argentino, filósofo y teólogo, quien falleció el 27 de este año.

Publicamos aquí una parte de la conferencia dada el 28 de marzo en Roma en la Pontificia Universidad Gregoriana por el teólogo jesuita Juan Carlos Scannone en el Congreso " Las raíces del Papa Francisco. El Concilio Vaticano II en América Latina ".

El artículo fue publicado en L'Osservatore Romano , 29-03-2014. La traducción es de Moses Sbardelotto .

En memoria de Juan Carlos Scannone , reproducimos el artículo publicado aquí en IHU en 2014.

Aquí está el texto.

Aunque podemos hablar de una teología argentina antes del Concilio Vaticano II , no enfocaré mi atención en ella, sino en eso postconciliar . Durante el Consejo tuvieron lugar dos eventos importantes: la reunión en Roma para la ocasión de expertos conciliares de diferentes países latinoamericanos y el contacto mutuo (entre ellos, el argentino Lucio Gera ); La reunión de teólogos, no menos importantes que los especialistas, en el Colegio Franciscano de Petrópolis , Brasil , en 1964, que tenía como objetivos el examen del punto de vista teológico de la problemática de la Iglesia latinoamericana. Entre los pioneros que participaron estuvieron los peruanosGustavo Gutiérrez , el uruguayo Juan Luis Segundo y el mencionado Lucio Gera .

Bueno, ya en 1968, antes de Medellín , Gutiérrez había dado una conferencia titulada " Hacia una teología de la liberación ", dando así un nombre a la reflexión teológica que surgía en el clima del Consejo aplicado a nuestra América. Ese lenguaje y esa perspectiva fueron aceptados tanto en la Conferencia de Medellín (1968) como en la Conferencia posterior a Medellín , también en Argentina, especialmente por el propio Gera, experto en esa conferencia, y por los teólogos de Coepal (Comisión Episcopal para la Pastoral), así como por el Movimiento del Sacerdote del Tercer Mundo , nacido en respuesta al Manifiesto de los Obispos del Tercer Mundo(15 de agosto de 1967). La Conferencia Episcopal de Argentina fue confiada a Coepal en el postconcilio (1966), la tarea de preparar un plan pastoral nacional de acuerdo con el espíritu del Vaticano II . Estaba compuesto por varios obispos (Monseñor Marengo , Zaspe y Angelelli ), teólogos, pastores, religiosos, entre ellos Lucio Gera , Rafael Tello , ambos profesores de la Facultad de Teología de Buenos Aires, sacerdotes diocesanos Justino O'Farrel (anteriormente de la congregación de Don Orione ), Guillermo Sáenz(del movimiento de acción católica rural), Gerardo Farrel (experto en doctrina social de la Iglesia), Juan Bautista Capellaro (del movimiento Mundo Mejor), los jesuitas Fernando Boasso y Alberto Sily (ambos de Cias, Centro de Investigación y Acción Social), el erudito bíblico Mateo Perdía , las hermanas Aída López , Laura Renard y Esther Sastre , y otras.

Precisamente esta comisión fue el escenario en el que nació la teología argentina del pueblo, cuya marca ya era visible en la Declaración del Episcopado argentino en San Miguel (1969), especialmente en el documento VI, sobre pastoral popular, que aplicaba las directrices de Medellín a la Argentina. .

Aunque Coepal dejó de existir a principios de 1973, varios de sus miembros continuaron reuniéndose y renovarse como un grupo de reflexión teológica bajo el liderazgo intelectual de Gera . Este último también participó como experto en la reunión de Puebla , fue miembro del grupo teológico-pastoral de Celam , ejerció una fuerte influencia teológica y personal en el Movimiento del Tercer Mundo , y posteriormente fue miembro de la Comisión Teológica Internacional . Su teología era más oral que escrita, pero de todos modos nos dejó textos importantes, y muchas de sus intervenciones orales fueron grabadas oportunamente y luego transcritas.

El contexto político argentino de la época incluía el gobierno militar de Onganía (una dictadura, pero no tan cruel como la de Videla ), la proscripción del peronismo hasta su caída en 1955, la represión del movimiento obrero peronista, el nacimiento de la futura guerrilla y un nuevo fenómeno, probablemente debido a las circunstancias ya mencionadas: muchos intelectuales progresistas, profesores y estudiantes universitarios de la época apoyaron al peronismo como resistencia popular al ejército y como movimiento de protesta social, algo que no había sucedido durante las presidencias de Perón .

Así nacieron en las universidades de Buenos Aires las llamadas cátedras nacionales de sociología, con figuras destacadas como Justino O'Farrell , Gonzalo Cárdenas , Alcira Argumedo , José Pablo Feinmann y la filósofa Amelia Podetti , entre otros. El primero, Justino O'Farrell, fue de hecho el vínculo entre estas sillas y Coepal, siendo parte de ambas instituciones y desempeñando un papel importante en ambas. Así, al distanciarse del liberalismo y el marxismo, ambos encontraron su propia definición conceptual en la historia latinoamericana y argentina (oral y escrita) con categorías como "pueblo" y "anti-pueblo", "pueblos" y "imperios", "cultura popular", "religiosidad popular", etc.

En el caso de Lucio Gera y Coepal , fue el Pueblo de Dios  , una categoría bíblica privilegiada del concilio para designar a la Iglesia, y de los pueblos, especialmente los argentinos. Para ambos, lo que estaba en juego no era solo el surgimiento de los laicos en la Iglesia, sino también la inserción de la Iglesia en la experiencia histórica de los pueblos, como sujetos de historia y cultura, receptores de evangelización y, si ya estaban evangelizados, también evangelizadores. Creo que fueron influenciados, como la teología latinoamericana. de la época, por la "teoría de la dependencia", pero se entendía no tanto en el ámbito económico como en la dominación política (imperial), que incluye lo económico, enmarcando tanto la línea evangélica de liberación integral del pecado como sus consecuencias sociales. y estructural.