"A pesar de la opresión que podrían causar estas manifestaciones de la reaparición de la extrema derecha en América Latina y otras partes del planeta, no compartimos el pesimismo extremo que existe entre algunos agentes, aunque no podemos entenderlo. Un pesimismo que cree que el capitalismo alcanzó victoria total en América Latina y que cualquier opción que queda se convirtió en impracticable. por el contrario, creemos que esta ruptura afecta progressismos , y que debería permitir nuevas opciones para reconstruir la izquierda ", escribió Eduardo Gudynas , ecologista e investigador adscrito al Centro Latinoamericano de Ecología Social - CLAES, yAlberto Acosta , un economista, fue presidente de la Asamblea Constituyente de Ecuador y candidato presidencial por la Unidad Plurinacional de las Izquierdas. La traducción es por Wagner Fernandes de Azevedo .
El artículo
Continúa análisis aluviales y opiniones sobre los cambios políticos dramáticos en Brasil . A partir de los demás países sudamericanos se observa con mucha atención lo que ocurre, y, al menos desde nuestra perspectiva, es necesario identificar y aprender de lo que sucedió en el país. Lo que nos enseña el Brasil para evitar, por ejemplo, que la extrema derecha llegar a la presidencia en Ecuadoro Uruguay ? Prevenir el ejemplo Bolsonaro permita que se acentúan aún más la desviación hacia la derecha en Chile y Colombia ? Sin negar las intromisiones externas o las desviaciones internas, es necesario reflexionar sobre lo ocurrido.
Es apropiado a partir de una reflexión de Florestan Fernandes sobre Brasil . En una conferencia que tiene mucha validez, incluso si han pasado más de la mitad de un siglo, se ofreció en 1965 a estudiantes de la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes de la Universidad de Sao Paulo , indicó que "de hecho, es casi nula la diferencia separa el presente del pasado en muchas comunidades humanas brasileñas, donde aún imperan formas arcaicas de mandonismo. También es sabido que los tres experimentos fallidos republicanas en el nivel elemental para asegurar la viabilidad histórica régimen democrático y el funcionamiento de la normalidad (por no decir el crecimiento) "(1).
Siguiendo estas ideas, usted tendría que preguntar siguiendo el despotismo reinante arcaica que describe Florestán , o si este último ciclo de nuevo republicano dejar de garantizar y fortalecer la democracia . En un artículo anterior exploramos algunas de las primeras lecciones que se podían tomar (2). Se parte de la distinción entre progressismos y dejamos a explicar que progressismos como el Partido de los Trabajadores - PT abandonaron muchos compromisos de la izquierda de los cuales nacieron. Entre ellos destacamos la incapacidad para romper con las estrategias de desarrollo subordinadas como proveedores de materias primas, mientras se refugia en políticas sociales cada vez más asistencialistas y mercantilizadas, sin cambiar lasestructuras arcaicas de la acumulación de capital o la concentración de la riqueza . Nosotros advertimos que los experimentos de la radicalización de la democracia se apagaron, y en cambio la parte que prevalecieron verticalidad, el culto del caudillo. No se rompieron los vicios de la corrupción política y tampoco se dieron pasos para transformaciones estructurales, todo con el que se hace analogía con las advertencias de Florestán.
En este artículo nos proponemos a explorar algunos de los elementos que son comunes a estos y otros problemas, de Florestan Fernandes , para completar una vuelta a ella, y su llamada a la función que deben desempeñar los intelectuales.
Simplificaciones que caen en el esencialismo
Observando desde el exterior la situación brasileña, con todo lo que esto puede tener de ventajoso como también de limitado, en primer lugar impresiona el giro político. El giro se produjo después de casi cuatro gobiernos sucesivos en las manos de una coalición progresista (dos administraciones de Luiz Inacio Lula da Silva , un completo Dilma Rousseff y el otro abortado). A partir de una perspectiva histórica, el giro a la derecha radical fue vertiginoso.
Inmediatamente se debe apuntar otra particularidad. Muchos análisis, tanto dentro de Brasil y en América Latina insistieron en las descripciones esencialistas. Los gobiernos del PT eran presentados, tanto por otras izquierdas como incluso por conservadores, como una maravilla, se insistía en ganancias rotulantes (como la sustantiva reducción de la pobreza), y los presentaba como un ejemplo a seguir para las izquierdas de los países vecinos. Se dijo que Lula era un serio izquierda, el tipo socialdemócrata, y lejos de la locura, por ejemplo, Hugo Chávez en Venezuela . Hoy en día han cambiado los argumentos y las voces, pero se repite ese esencialismo totalizante: Brasil ahora se ha convertido en el ejemplo de la peor extrema derecha.
Muchos de estos enfoques son el mismo esquema que indica que " la gente " hace unos años fue empujado hacia la izquierda, celebra ahora de repente el uso de armas, achincalhar migrantes o indígenas, o refugiarse en el dogmatismo religioso. Es por ello que nos alertan sobre la superficie utiliza categorías tales como " la gente ".
Este problema se repite en varios países sudamericanos. Es así que en Argentina muchos intelectuales y líderes sociales insisten en que los gobiernos de matrimonio Kirchner habían cambiado para siempre la sociedad argentina, mientras que en Bolivia anuncia que creó un Estado "plurinacional" con un predominio de "indígena". Ahora sabemos que las dos posiciones son tanto simplificaciones como exageraciones.
Esquivando las críticas
En Brasil, el PT y su base aliada, al igual que en otros gobiernos progresistas, cuando cae en simplificaciones que insisten en presentar como casi todos de que era positivo, no hay lugar ni para la advertencia o crítica, o para realizar ajustes y cambios. Aquellas posturas muestran que se minimizaron muchos problemas, e incluso se negaban las contradicciones. Al abordar las situaciones dentro del Brasil , la crítica y la autocrítica fueron suspendidos por muchos, tanto dentro como fuera del país. No entienden las advertencias sobre las crecientes contradicciones en el gobierno del PT y sus aliados . Era más simple minimizar u ocultar los problemas, negar los enfrentamientos, o recurrir a eslóganes. Entre ellos se adjetivaban las alertas como expresión de laoposición conservadora , siendo un niño dejado o para servir al imperialismo extranjero , sólo para nombrar un pocos. Por lo que sólo cualquier crítica fue despedido de antemano, porque era la derecha del juego , dijo.
La negación de la autocrítica y la detección irracional también observó, con diferentes intensidades, en los países donde todavía rigen progressismos. Esto va de la persecución directa de la disidencia del partido y el colapso de las garantías democráticas en Venezuela , la descomposición política del gobierno de Ortega en Nicaragua , a través del abuso electoral como con el Movimiento al Socialismo - MAS en Bolivia que califica cualquier voz de advertencia como neoliberal , la oposición o la derecha, y llega a la posición del gobierno de Tabaré Vázquez en Uruguay que simplemente se refugia en una postura pedante y silenciosa.
Uno puede responder que las agrupaciones progresistas o de izquierda partidarios promueven la crítica, la cual llevó a cabo seminarios invitando a todo tipo de panelistas discuten con los movimientos sociales, y así sucesivamente. Pero en realidad, una vez ganado el gobierno, todos ellos avanzaron para el enclavamiento y blindaje. Y lo que es más grave, grupos de pensamiento otrora críticos terminaron por orquestar reuniones que demuestran que en ese paso simplemente van a morir de nostalgia por el poder que perdieron.
Una insistencia notable fue la adhesión a diferentes versiones del " nuevo desarrollismo " como una forma que no podía ser cuestionada. Es cierto que estas estrategias han permitido el inicio de algunos avances importantes, entre ellos el más destacado y repetida es la reducción de la pobreza . Sin embargo riñeron todas las advertencias que se han hecho sobre los límites de un desarrollo que siguieron basadas en las materias primas que se exportaron, pero que generan graves de degradación ambiental y los conflictos locales, en paralelo a la pérdida de tierras para los sectores industriales. En ese contexto se mezclan reivindicaciones de empleo y salud con otras, como las demandas económicas. Consumismo y ayuda en dinero a los sectores más pobresfortalecido la lógica de patrocinio (a menudo sostenida en una intimidación caudillo) sin acumulación o la ciudadanía sería fortalecer las organizaciones sociales responsables y autónomas, esencial para realizar los cambios estructurales que se requieren en una realidad.
El sueño de resolver las contradicciones y conflictos por medio de compensaciones económicas, entregando todo tipo de bonificación, fue derribado. En condiciones donde el consumismo crea una imagen falsa de bienestar en grandes grupos sociales , la falta de espacios plurales para oposiciones sobrepesar, siembran el suelo para atraer a un narcisismo nacionalista que pronto se conecta con la xenofobia . El racismo xenófobo ya no se produce sólo en Brasil . Últimamente se percibe y vivió en las calles de ciudades en Colombia , Ecuador , Perú y Chile . Y en ambos se envuelve sobre todo la migración venezolana, aprovechando paraacusar al socialismo como la raíz de todos los males .
La situación, en fin, ha llegado a ser muy extraño, hubo muchas discusiones sobre diferentes variedades de desarrollo, pero está impedido de pensar más allá del desarrollo. El debate crítico y plural se ha empobrecido.
Lo mismo ocurre en los países vecinos. La subordinación global como proveedores de materias primas se profundizó en Venezuela , Ecuador y Bolivia , y al igual que en Brasil , los sectores industriales también reduce o se simplifica en Argentina y Uruguay . Y en esas naciones ese desarrollismo origina conflictos similares. Un análisis exhaustivo de esta dinámica nos permite entender el limitado potencial del cambio progresista .
Las posturas ante el desarrollo son una de las temáticas principales para distinguir entre progresismos e izquierdas, y que afectan a varios grupos en los países vecinos. Por ejemplo, en Perú la alianza Frente Amplio ganó una votación clave, se rascó la segunda vuelta presidencial, y formó una importante delegación en el Congreso. Pero en poco tiempo se quebró debido a una mezcla de disputas personales y contradicciones más estructurales: un ala progresista que defiende un desarrollismo estatista, el estilo de PT , y la otra apuesta grupo que alimentar a una crítica más radical antes del desarrollo. Esta misma tensión se encuentra presente en el Frente Amplio de Chile , otro grupo que alcanzó un importante número de miembros elegidos en la última campaña.
El nuevo desarrollismo golpeó principalmente a los pobres y marginados en las ciudades y el campo, y en particular a los indios. Esto alimentó las luchas del progresismo con organizaciones campesinas, indígenas, ambientalistas y feministas, etc.
En resumen, los conflictos y las contradicciones proliferan, pero se observan con estar presente en la atención Brasil y otros gobiernos progresistas . Lo que sucede ahora es que estas situaciones son ahora más difíciles de ocultar, y llegaron a tal extremo en Brasil que la inmovilidad del progresismo se convirtió en uno de los muchos factores que explican sin duda la victoria de Bolsonaro .
Corregir las izquierdas y la política
Al final, se buscó silenciar los problemas, pero no resolverlos. Por lo tanto, aumentar las contradicciones entre los diferentes grupos sociales , o entre capital y la naturaleza , o entre la soberanía nacional y la subordinación de la globalización , por mencionar sólo tres situaciones. Estas contradicciones siguen su marcha, se suman tensiones, las personas se cansan, se irritan, se enojan, y llega un momento en que se corroe gran parte de la base de sustentación ciudadana del progresismo.
Aquí hay varios problemas sociales . Mientras insistimos que progresismos e izquierdas son distintos, los cuestionamientos y el cansancio ciudadano termina englobando a la izquierda. Es comprensible que durante gran parte de la opinión pública izquierda y el progresismo son los mismos, especialmente la insistencia de progressismos en sí mismo califica como una nueva izquierda, en la una parte, y por la sistemática acción de confusión y demolición ideológico que realizan las fuerzas de derecha, por otro lado. A continuación, los progressismos desastre como el PT en Brasil o kirchnerismo Argentina tiene un resultado asociado que es aún más problemático reconstruir una cierta izquierda que son realmente nuevo.
En este frente también operar la falta de un análisis riguroso y la crítica, por ejemplo, acerca de las particularidades de progressismos , sus diferencias con las tradiciones de la izquierda latinoamericana , o el abuso de sellos como el populismo para cada tipo de régimen político.
A su vez, el desencanto y la ira con progressismos en Brasil -, así como en otros países - también afecta a la calidad de la política. Observamos una caída de la confianza ciudadana en los partidos políticos, en los poderes legislativos o ejecutivos. Como indica el informe Latinobarómetro 2018 , el apoyo a la democracia se reduce sistemáticamente desde 2010 , llegando a 48% en 2018 (3). A medida que comenzó a crecer el porcentaje de los que preferirían un régimen autoritario, ese mismo análisis advierte que "los ciudadanos de la región que abandonaron el apoyo al régimen democrático prefieren ser indiferentes al tipo de régimen, alejándose de la política, de la democracia y sus instituciones. Este indicador nos muestra una pendiente por indiferencia. Son esos indiferentes que votan los que están produciendo los cambios políticos, sin lealtad ideológica, ni partidaria y con volatilidad "(3). Todo esto alimenta las posturas antipolitical que preparan un terreno fértil para aventuras ultraconservadores, como expresar Bolsonaro .
Este deterioro, se aplica a la prensa para insistir en que era nada menos el papel de los escándalos de corrupción que salpican en todos estos gobiernos . Todos progressismos , que en sus orígenes ofrecían para luchar contra ella, tenían problemas de corrupción , aunque con diferente intensidad y extensión. Es una situación que fue aprovechada por los medios convencionales de comunicación, insistiendo una y otra vez en parcelas como la Petrobras y las empresas como un problema exclusivo de la izquierda .
Relanzar las izquierdas
No se puede dejar de sorprender que el mismo país que hace unos años se presentó como un ejemplo de "marea hacia la izquierda", una "nueva" desarrollismo y un líder popular , pasó ahora a ser un estudio de caso en la dirección opuesta. Una tendencia que para algunos anuncia una catástrofe democrática. Esta situación merece una reflexión adicional pensando en las respuestas que son necesarias para afrontarla.
Los ejemplos expuestos tienen en común la prevalencia de análisis simplistas y esencialistas. A esto se añade la falta de auto-crítica , incluyendo la oposición activa a la misma. La asfixia de la pluralidad de voces se deteriora opciones de izquierda a renovar, pero al mismo tiempo implica un debilitamiento de la democracia .
Esto permite volver a Florestan Fernandes , como en su conferencia de 1965 también señaló que "no tengo ninguna duda en sostener que el único elemento muy positivo de nuestra historia reciente en relación con el pequeño progreso que hemos logrado en la democratización de la esfera de poder." En su intento de ajustarse creatoriamente a la sociedad brasileña, se objetiva en la obligación permanente de contribuir, como pueda, para extender y profundizar el apego del hombre medio al estilo democrático de vida " .
¿Qué pasó con los progressismos es que se han vuelto cada vez más comunes los casos de intelectuales que dejaron el pensamiento independiente y se añadieron al coro de apoyo, más que el análisis que escuchó los reclamos de las comunidades locales, el preferido puntos de vista y argumentos burocracia estado de desarrollo, y así sucesivamente. Este deterioro de las capacidades de análisis crítico y autocrítico es un factor muy importante para explicar el agotamiento de los progresismos.
¿Qué Brasil espectáculos son las consecuencias de fallas, deficiencias o debilidades en esta tarea. Las ideas que bastaba conquistas a la presidencia para cambiar todo, fueron demolidas por la realidad. Sobre todo, porque una vez que el palacio de gobierno, asumiendo los titulares de la voluntad colectiva y casi dueños de la verdad, que se cree que ya no era necesaria para seguir profundizando la democracia . Posiciones que, sin duda alguna, se revelaron no sólo ajenas a la izquierda, sino que terminan siendo funcionales a medio plazo a la extrema derecha. La democratización en buscar alternativas al desarrollo no puede ser confundida, ni reducida, a la nacionalización de recursos o sostener empresas estatales.
Florestán insistido en que " los intelectuales brasileños deben estar convencidos y campeones inflexibles de la causa de la democracia." En este compromiso democrático es la necesidad de aceptar, reconocer y escuchar las advertencias, las reclamaciones y críticas. Allí se abren las puertas para una renovación desde la izquierda.
A pesar de la opresión que podrían causar estas manifestaciones resurgimiento de la extrema derecha en América Latina y otras partes del planeta, no compartimos el pesimismo extremo que existe entre algunos agentes, aunque no podemos entenderlo. Un pesimismo que cree que el capitalismo ha logrado una victoria total en América Latina y que cualquier opción que queda se convirtió en inviable. Por el contrario, creemos que esta ruptura afecta progressismos , y que deben permitir nuevas opciones para reconstruir la izquierda.
Aceptamos que esa situación de excepcionalidad que vivimos es fruto de procesos profundos que debemos comprender mejor, y que son parte del complejo y convulso cambio civilizatorio. Por eso las alternativas para reconstruir las izquierdas que surgen de la resistencia ante esos atropellos, no pueden ponerse en marcha como forma de imposición de una vanguardia que cree haber leído correctamente el piso de la historia. Llamamos a la izquierda que son conscientes de los límites del planeta, y por lo tanto explotar una renovación ecológica, que toma la brutalidad del patriarcado , y apostando por otras relaciones de género. Izquierdas que exceden las colonialismo y que enfrenta el racismo , desigualdadesylas desigualdades sociales .
Todo esto en un proceso continuo de radicalización de la democracia . Para sin crear más democracia se corre un riesgo en Brasil , dijo Florestán , y como agregado, en otros países de América Latina : que el capitalismogenera "formas de despojo y las desigualdades sociales tan chocante, inhumanas y degradantes como otros que han elaborado en nuestro pasado agrario ".
billetes
(1) Fernandes F . Sociedad de clases y subdesarrollo. 5ª edición, Global, Sao Paulo, 2008.
(2) La extrema derecha en el poder en Brasil. ¿Y ahora? Gudynas A. E. Acosta y , correo electrónico Ciudadanía 8 de noviembre de 2018
(3) Latinobarómetro 2018 . Corporación Latinobarómetro, Santiago de Chile.
(2) La extrema derecha en el poder en Brasil. ¿Y ahora? Gudynas A. E. Acosta y , correo electrónico Ciudadanía 8 de noviembre de 2018
(3) Latinobarómetro 2018 . Corporación Latinobarómetro, Santiago de Chile.
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